Vivimos en un mundo sedentario. Pasamos horas y horas sentados en una silla mirando la pantalla del ordenador, sin movernos en absoluto. Nuestra espalda, por supuesto, se resiente. Y lo notamos.
Muchos dolores de espalda no vienen solo de las malas posturas sino, sobre todo, de estas prácticas sedentarias, de ahí que lo adecuado sea aprender ciertas conductas que nos van a ayudar a tener menos dolores de espalda y a convertirlas en hábitos.
¿Trabajar caminando?
Nietzsche lo hacía,cuenta El Confidencial. Decía que era la mejor manera de que fluyeran las ideas. Como a nosotros nos es un poco difícil caminar escribiendo con el ordenador en la mano, aunque sea portátil, quizá deberíamos comenzar a concienciarnos de la importancia de los estiramientos.
(Imagen Renny Tan)
«Según los doctores, en muchas ocasiones creemos que nuestro terrible dolor de espalda -ese que dejamos pasar porque, total, tampoco tenemos tiempo de ir al fisio- se debe a una mala postura mientras estábamos sentados, y en realidad se debe al hecho de haber pasado sentados tantas horas.
No hay estudios que relacionen dolor y malas posturas». Sin embargo, la vida sedentaria sí que puede ser un factor desencadenante de que acabemos andando como Fido Dido por la calle».
Es por tanto fundamental moverse de vez en cuando. Está estipulado, según los estudios, que es beneficioso para la salud que las personas se levanten cada hora y caminen por la oficina, pero es cierto que a veces nos encontramos tan abstraídos con nuestro trabajo que se nos olvida hacerlo.
Sin embargo no podrás abstraerte cuando el dolor llame a tu puerta. Entonces debes hacer una rutina de estiramientos, mueve las caderas un poco, el cuello, estira la espalda baja… si el dolor persiste continuamente -es decir, ya es crónico- consulta con un especialista.
Por supuesto, hay actividades que pueden reducir el dolor de espalda, como el pilates o el yoga.